Com uma melodia excepcional, conta as frustrações de um aficionado em corridas de cavalos, que compara seu vício à relação com uma mulher volúvel e fútil, que jura o amor que está mentindo, queimando em uma fogueira todo bem querer que lhe é dedicado.
Tive sempre a impressão que está música contava uma história de amor, pois sem a letra, nos deixamos levar por seu ritmo, criando em nossa imaginação diversos enredos, quase sempre com uma conotação romântica.
A cena do filme "Perfume de Mulher", em que Al Pacino tira Gabriele Anwar para dançar tornou-se um dos ícones do cinema, criando o interesse no tango para quem não o conhecia.
Gardel e Le Pera morreram no mesmo acidente aéreo em 1935, mas como dizem os argentinos, Carlito continua cantando cada dia melhor.
Por una cabeza
de un noble potrillo
que justo en la raya
afloja al llegar,
y que al regresar
parece decir:
No olvidéis, hermano,
vos sabés, no hay que jugar.
Por una cabeza,
metejón de un día
de aquella coqueta
y risueña mujer,
que al jurar sonriendo
el amor que está mintiendo,
quema en una hoguera
todo mi querer.
Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida
qué importa perderme
mil veces la vida,
para qué vivir.
Cuántos desengaños,
por una cabeza.
Yo jugué mil veces,
no vuelvo a insistir.
Pero si un mirar
me hiere al pasar,
sus labios de fuego
otra vez quiero besar.
Basta de carreras,
se acabó la timba.
¡Un final reñido
ya no vuelvo a ver!
Pero si algún pingo
llega a ser fija el domingo,
yo me juego entero.
¡Qué le voy a hacer..!
de un noble potrillo
que justo en la raya
afloja al llegar,
y que al regresar
parece decir:
No olvidéis, hermano,
vos sabés, no hay que jugar.
Por una cabeza,
metejón de un día
de aquella coqueta
y risueña mujer,
que al jurar sonriendo
el amor que está mintiendo,
quema en una hoguera
todo mi querer.
Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida
qué importa perderme
mil veces la vida,
para qué vivir.
Cuántos desengaños,
por una cabeza.
Yo jugué mil veces,
no vuelvo a insistir.
Pero si un mirar
me hiere al pasar,
sus labios de fuego
otra vez quiero besar.
Basta de carreras,
se acabó la timba.
¡Un final reñido
ya no vuelvo a ver!
Pero si algún pingo
llega a ser fija el domingo,
yo me juego entero.
¡Qué le voy a hacer..!
Obrigado, magnifico.
ResponderExcluirO que é isso??
ResponderExcluirisso é bom d+!!
Em todas as minhas vidas eu amei sem limites Carlos Gardel
ResponderExcluir